Como sabemos a partir del 15 de noviembre de 2013, la nueva generación de consolas empezó su camino con la salida de la PlayStation 4, y una semana después  salió al mercado la Xbox One. Desde entonces las ventas han sido muy satisfactorias (sobre todo en el caso de la PS4), pero lo cierto es que si hablamos de contenido, el arranque de esta nueva generación ha sido algo pobre desafortunadamente. Quizás nuestros gamers han quedado algo insatisfechos, pero con el evento mundial celebrado en los Angeles, el E3 2015, se podrán ver muchas sorpresas.

Todo esto no es algo especialmente sorprendente en el arranque de la generación. Los desarrolladores suelen sacar nuevas versiones de juegos antiguos para vender a todos aquellos que no los disfrutaron y al mismo tiempo siguen desarrollando para la antigua generación para no perder a todos aquellos que no han actualizado aún.

Sin embargo, el arranque de esta generación estaba empezando a retrasarse más de lo normal, y aunque es verdad que en el último año ya hemos visto algunos buenos títulos como Middle-earth: Shadow of Mordor, Bloodborne o The Witcher 3: Wild Hunt, a estas consolas aún les faltaba algo más de impulso.

Por suerte, el evento E3 2015 ha dejado muy claro que las nuevas consolas ya han tomado fuerza, y hemos podido ver el contenido que llegará desde finales de este año hasta el 2018. Las conferencias de este año simplemente han superado todas las expectativas de la inmensa mayoría de la comunidad. Por otro lado, finalmente han llegado títulos tan codiciados que llevábamos esperando tales como The Last Guardian (para 2016) o Shenmue III (planeado para finales del 2017).